Joaquín Egea
Candidato alcaldía de Alcañiz
Un campus para reunirlos a todos
La Universidad de Educación a Distancia (UNED) ha celebrado a lo largo de 2022 su cincuenta aniversario
Cuando surge el proyecto de Universidad a distancia en 1972 nace con vocación de llegar a alumnos que no pudieron iniciar o concluir la enseñanza superior o graduados que deseaban estudiar una segunda carrera mientras trabajaban; estudiantes en su mayor parte residentes del medio rural o en pequeñas y medianas ciudades donde no existían centros de enseñanza superior. De manera que podemos encontrar centros asociados a la UNED en la provincia de Zaragoza en Calatayud con sus extensiones en Caspe y Ejea de los Caballeros o en la provincia de Huesca en Barbastro con aulas en Fraga y Sabiñánigo. Sin embargo en la provincia de Teruel, contraviniendo su propio espíritu fundador, la UNED abrió su centro asociado en la capital en 1986 donde ya existían entonces estudios universitarios frente a la posibilidad haberlo situado en Alcañiz, como segunda ciudad de la provincia; que habría permitido a los habitantes del norte de Teruel, lo que comúnmente conocemos como Bajo Aragón Histórico, tener próximos estudios universitarios, que tuvieron que ir a buscar a las provincias vecinas.
Hace años que desde el territorio bajo aragonés se reclamaba la idoneidad de tener un centro asociado de la UNED, varias han sido las iniciativas en diferentes administraciones que han pretendido desarrollar este centro asociado. Sin embargo, todas éstas no pasaban de meros gestos hacia la galería muy lejos de compromisos reales de entablar las conversaciones entre las partes competentes en la toma de esta decisión. No había voluntad por afrontar este reto ni desde pretéritos Ministerios de Universidades ni desde sus respectivos Gobiernos Autonómicos.
Desde el inicio de esta legislatura la Agrupación de Electores Teruel Existe ha trabajado por conseguir demostrar que desde los territorios de la España Vaciada se puede aportar mucho al conjunto de la sociedad española. Este espíritu, unido a una voluntad clara del Ministro de Universidades Manuel Castells conocedor y admirador del movimiento ciudadano que desde 1999 lucha por la dignidad y futuro de la provincia de Teruel, propició el desarrollo de lo que hoy son las aulas de la UNED de Alcañiz y Calamocha; ambas dependientes del centro asociado de Teruel. Iniciando de esta manera el Ministerio de Universidades la pretendida política, con más voluntad y anuncios que realidades, del Gobierno de España de lucha contra la despoblación.
Quizá pueda parecer poco premio conseguir que en Alcañiz se haya abierto un aula de la UNED cuando lo pretendido era tener un centro asociado. El conocimiento de la historia moderna alcañizana nos trae ejemplos de proyectos inicialmente modestos que con trabajo y tesón de las partes involucradas han llegado a ser emblemas de nuestra ciudad. Un claro ejemplo es el desarrollo del Conservatorio de Alcañiz, que inició su andadura en nuestra ciudad como una escuela de música relegada a un pequeño espacio en el teatro. La visión de futuro de algunos y su intenso trabajo junto con un gran apoyo político (nunca reconocido) de quienes tenían entonces la posibilidad, permitieron que aquel primer espacio se trasladara a un espacio en la Lonja y más tarde pasara a su ubicación actual. Creando en el Bajo Aragón un Conservatorio Profesional de Música que permite a los bajo aragoneses tener unos estudios de música que hoy, si se tuviera que iniciar desde cero esta infraestructura, sería impensable tener. Por lo tanto, debemos valorar lo conseguido pero con el compromiso de que este debe ser sólo un pequeño paso y que debemos aspirar a más.
El proyecto en su conjunto que se presentó al Ministerio recibe el nombre de “Universo Teruel”, cuyo desarrollo pretende demostrar cómo desde un territorio en declive demográfico y abandonado de las políticas de desarrollo del Estado durante décadas se puede aportar conocimiento y desarrollo científico al conjunto del país. La idea global del proyecto es no sólo dar la posibilidad de poder educarse universitariamente sin abandonar el territorio de nacimiento sino, con el apoyo de la universidad, desarrollar investigaciones científicas a partir de los recursos endógenos; de esta manera en el centro asociado de la UNED en Teruel y en colaboración con el aeropuerto se ha desarrollado una cátedra de drones y aviación civil; en el aula de Calamocha se pretende desarrollar una cátedra sobre el sector agroalimentario aprovechando la experiencia en el valle del Jiloca en este sector. En Alcañiz, se puso en marcha el IHUPA (Instituto para las humanidades y el patrimonio); un Instituto Universitario creado para generar un vigoroso espacio de reflexión y actuación comunes en esta ciudad turolense, creando sinergias entre las tres Facultades de Humanidades de la UNED y otros centros y organismos. Un instituto que desde su creación ha olvidado la importante labor que en el estudio de las Humanidades y el Patrimonio han realizado organismos con el IEH (Instituto de estudios Humanísticos), el CESBA (Centro de Estudios del Bajo Aragón), el Taller de Arqueología y a la Fundación Quílez Llisterri.
Alcañiz se siente cuna orgullosa del Humanismo español gracias al pensamiento y las obras desarrolladas por esa gran nómina de humanistas que la ventura quiso que nacieran en nuestra ciudad.
Es precisamente la labor divulgativa del IEH, recientemente reconocida con la medalla de oro del ayuntamiento de Lebrija y donde hasta 7 universidades nacionales e internacionales realizan su labor investigadora, la que permite que Alcañiz sea un referente en el estudio del Humanismo Renacentista. Sus más de veinte años de trabajos de investigación nos legan un fecunda colección de libros, de la que es desde este año custodia la biblioteca del Senado, que servirá para que actuales y futuras generaciones sepan lo importante que fue nuestra ciudad para el desarrollo de las Humanidades en una sociedad diezmada entonces por la peste negra que supo levantarse poniendo al Ser Humano en el centro del desarrollo haciendo florecer el pensamiento que permitió los avances que desde entonces se dieron.
Tal es trabajo y la labor realizada por el IEH que no debe ni minusvalorarse, ni perderse; es por lo tanto necesario que aprovechando la llegada de la UNED a Alcañiz, en colaboración con la Universidad de Zaragoza y el IEH, invitando a participar a todas las asociaciones culturales antes referenciadas se desarrolle un “Campus Interuniversitario Internacional” en Alcañiz; un campus para reunirlos a todos; un campus para potenciarlos, para llevar a nuestra ciudad y a los estudios humanísticos a donde merece en la sociedad actual que se enfrenta a nuevos desafíos.
Es el momento en que dejemos trabajar a los responsables universitarios para conseguir alcanzar esta meta; el resto deberemos apoyar en el ámbito en el que desarrollamos nuestra actividad para que donde no llegue el conocimiento llegue la política.■
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