13 noviembre 2021

#JavierGimeno #Alternatic - Volver a las raíces dejando la gran ciudad

Nerea Leal en su puesto de trabajo en Alternatic.

Volver a las raíces dejando la gran ciudad


Nerea Leal una calandina que ha dejado la gran ciudad, para venirse de nuevo a su municipio con la oportunidad laboral que le ha ofrecido Alternatic, acorde a su formación y expectativas.
La decisión del cambio de pasar de vivir en una ciudad a un pueblo un urbanita la toma por diferentes circunstancias. Demasiado estrés, los habituales atascos, el elevado precio de la vivienda o la añoranza de volver a las raíces familiares pueden determinar una apuesta por la vida de pueblo.

Nerea Leal, Ingeniera Informática con un Máster en Dirección e Ingeniería de Sitios Web y nacida en Calanda (Teruel) hace 30 años, se ha incorporado desde hace poco más de un mes a nuestra empresa, Alternatic, en nuestra sede de Alcañiz. Hemos hablado con ella para que nos cuente que le ha llevado a dar el paso de cambiar Zaragoza por su pueblo natal y nos explique su experiencia, y qué está suponiendo para ella y para su familia el regresar a una pequeña población.

¿Cómo está siendo la experiencia de regresar a Calanda?

He vuelto con toda mi familia (mi marido y mi hija de 8 meses) y me encanta que mi niña tenga la familia tan cerca. Hemos pasado de tener a sus abuelos, sus tíos y sus primos demasiado lejos a contar con un contacto familiar diario. El hecho de poder vernos tanto y tan fácilmente supone para mí una recarga de energía continua. Aunque todavía estemos terminando de ordenar nuestros enseres, porque empezamos la mudanza la primera semana de septiembre, todos valoramos aspectos positivos de la vida en el mundo rural como, por ejemplo, poder disfrutar más de nuestro entorno y pasar más tiempo al aire libre de lo que lo hacíamos en Zaragoza.

«Me siento verdaderamente afortunada de haber encontrado un empleo en una empresa como Alternatic. Valoro trabajar en una compañía que persiga la mejora del entorno rural en el que nací y vive toda mi familia»

   

¿Qué supone para ti poder trabajar en Alcañiz?

Me siento verdaderamente afortunada de haber encontrado un empleo en una empresa como Alternatic. Valoro trabajar en una compañía que persiga la mejora del entorno rural en el que nací y vive toda mi familia. A través de los servicios que esta ofrece de telefonía e internet contribuimos al establecimiento de nueva población y la generación de nuevos empleos.

Durante los once años que viví en Zaragoza, lo único que me ataba a la ciudad era el trabajo. Cuando nació nuestra hija, en plena pandemia y confinamientos, nos planteamos como afrontar la nueva situación, por lo que al encontrar un puesto en el departamento de soporte de Alternatic, no me lo pensé dos veces y decidí regresar a mi tierra. Además, llegar a desde Calanda a Alcañiz, aunque en distancia sea más, solo me supone un desplazamiento de 15 minutos, durante el cual no me encuentro atascos y al llegar al puesto de trabajo, puedo aparcar siempre sin problemas, algo impensable en Zaragoza.


¿Qué ventajas crees que tiene vivir en Calanda?

Calanda, con sus casi 4.000 habitantes, tiene todos los servicios. Existen grandes núcleos familiares y la relación entre amigos o vecinos es más cercana de la que se establece en cualquier ciudad. Además, la libertad de los niños, conforme crecen, para ir solos por la calle es un punto realmente positivo respecto lo que supone vivir en una ciudad.


¿Recomiendas la experiencia?

¡Si, sin duda! Mi formación y experiencia me han abierto las puertas a un nuevo desafío profesional en mi pueblo. Además, el hecho de tener hijos me ha cambiado el punto de vista. No nos falta de nada ni en Calanda ni en Alcañiz, disponemos de igual acceso a todos los servicios y a cualquier estudio hasta la etapa universitaria. Yo misma estudié en el pueblo y me fui a seguir con los estudios fuera de él, cosa que no me ha provocado ningún problema ni me ha privado de ninguna oportunidad.

Uno de los argumentos que he escuchado más a menudo es el de que en el pueblo no voy a tener todo lo que tengo en Zaragoza, pero la verdad es que aquí no nos falta de nada, tenemos todos los servicios, y encima ganamos en calidad de vida, que en la ciudad no puedes tener.

«Vivir junto a mi familia y a mis amigos hace que la vida sea más fácil y que te puedas plantear tener más hijos, cosa que estando en Zaragoza habíamos descartado por completo»

   

¿Y en el futuro, como te ves?

Ya no me veo viviendo en otro sitio. Lo que me ha devuelto mi pueblo no lo cambio por nada. Vivir junto a mi familia y a mis amigos hace que la vida sea más fácil y que te puedas plantear tener más hijos, cosa que estando en Zaragoza habíamos descartado por completo.

Es vital que las compañías apuesten por el futuro, por puestos de trabajo adaptados a los nuevos tiempos para evitar el fenómeno de la España vaciada, apostando por el mundo rural y contribuyendo al desarrollo del mismo. Con el objetivo de alcanzar una mayor calidad de vida, muchas son las personas que optan por regresar a sus lugares de origen, y nuestro trabajo, el de las empresas afincadas en el medio rural, es el de ofrecer puestos atractivos que contribuyan a la conciliación, al apoyo a la mujer, al desarrollo y, en definitiva, a luchar contra la despoblación.■



Nerea con una panorámica de Calanda al fondo.



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