Susan Mene. Concejala PSOE Ayto. Alcañiz |
Y es que mientras la mayoría de personas nos quedamos en casa para minimizar la transmisión del coronavirus, el personal sanitario tiene que seguir yendo a trabajar a hospitales y centros de salud, en los cuales también tienen que ir a atender pacientes en sus domicilios, con un riesgo muy alto de contagio por COVID-19. Según las organizaciones colegiales un 14% de infectados en España son sanitarios, y algunos han muerto.
Al riesgo que tienen de infectarse hay que añadirle el agotamiento físico y mental; y el dolor de la perdida de pacientes.
Muchos sanitarios siguen esperando sus equipos de protección mientras siguen visitando pacientes infectados. Porque las mascarillas de tela hechas con todo el amor del vecindario, aunque son mejor que no tener nada, no reúnen los requisitos para que no se contagien o para que sean ellos los que contagien.
Ayer mismo me contaba Conchita como una de sus amigas, que trabaja en el hospital, había decidido dormir en un cuarto de su casa, separada de su marido y de sus hijos, por la preocupación que tenía de poder pasar la infección a su familia.
Se nos plantea un escenario por delante, en el que quizás el sistema sanitario tiene que seguir trabajando a su máxima capacidad por varios meses.
Y quizás todos los respiradores y todas las máquinas puedan seguir trabajando a su máxima capacidad durante meses. Pero debemos asegurarnos que se garantiza la protección de los trabajadores de sanidad. No son máquinas. Van a necesitar descansar, comer, van a necesitar de su familia y de sus amistades. Pero sobre todo necesitan tener los EPI’s adecuados.
En estos momentos, tal y como esta la situación mundial, el personal sanitario es lo más valioso que tenemos en el país. Va por vosotros. Muchas gracias.■
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